Dentro de las lecturas imprescindibles de Carlos Fuentes se encuentra el libro, es decir una novela en nueve cuentos, titulado “La frontera de cristal”.
Carlos es el mismo narrador de sus mejores libros: agresivo, vital, poderoso, encuentra todos los ángulos posibles en una historia con una variante insospechada: la comicidad, que ahora lleva al lector a la carcajada franca en algunas de sus páginas más memorables, no por ágiles menos penetrantes y agudas.
Como contraste a este humor, Fuentes aborda la problemática brutal de la inmigración, los abusos que en su nombre se cometen contra quienes han de salir de su país para ganarse el sustento. En esta novela (a través de nueve cuentos), Fuentes reproduce la separación que se ha dado entre Mexico y Estados Unidos a lo largo de 200 años. Y la examina con el cristal de la discriminación, el racismo, la violencia, la sexualidad, la fascinación mutua, el rencor y el sufrimiento. Pero también la fuerza de la vida mexicana, que parece sobrevivir a todas las agresiones de la injusticia.
La corrupción y el mal gobierno que ha habido en México, donde se originan los dramas de los personajes de “La frontera de cristal”, unidos entre sí por las servidumbres y grandezas de una familia: los Barroso.
Carlos Fuentes nació en 1928. Debido a los diferentes cargos que su padre ocupó en el servicio diplomático exterior mexicano, pasó parte de su infancia en diferentes países, como Estados Unidos y Chile. Es considerado como uno de los principales exponentes de la narrativa mexicana contemporánea. Fuentes tiene una vasta obra que abarca desde novelas, como la inmortal “La Región más transparente”, “La Muerte de Artemio Cruz”, “Cambio de piel”, “Zona sagrada”, “Terra nostra”, “La cabeza de la hidra”, “Gringo viejo” y “Cristobal nonato”. Hasta libros de cuentos como: “Cantar de ciegos”, “Guiones cinematográficos” y ensayos, como “El espejo enterrado”.
En 1954 recibió el Premio Príncipe de Asturias. “La frontera de cristal” es un libro indispensable que nadie debe perderse, ampliamente recomendable.