Rusia será siempre la estepa de los grandes muertos: Tolstoi, Dostoievski, Gogol, Chejov, Pasternak, Pushkin, Gorki, Mendelstham, Mayakowski, Esenin, Blok, Turguenev, Trakl, Babel, Ajmátova, Voznesenski, Brodsky…
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Dios se destruye todos los días.
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Aquel pobre loco se pasaba horas en el zoológico conversando con los animales. Un día, alguien se atrevió a preguntarle: -¿Y qué es lo que te cuentan? -Cosas increíbles, contestó.
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Para dejar de ser, sólo bastan unos cuantos segundos.
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La polémica siempre tiene algo de desvergüenza.
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A veces un atardecer o una fragancia nos reconcilian con el mundo.
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Desde el principio las ideologías empiezan a caminar con muletas.