
Al intervenir en la conferencia mañanera desde el Centro de Inteligencia de la Guardia Nacional, búnker construido durante la gestión de Felipe Calderón Hinojosa, la secretaria de Seguridad Pública, Rosa Icela Rodríguez Velázquez declaró que este espacio concebido como un centro de inteligencia, tecnología e información y cerebro informático no cumplió su propósito de combatir a la delincuencia organizada.
El recinto inaugurado en noviembre de 2009 tuvo un costo de 3 mil 346 millones de pesos, se convirtió en un edificio lleno de pantallas “para apantallar” a quienes lo visitaban, dijo la responsable de la política de Seguridad Pública en el país.
El llamado Centro de Inteligencia de la Policía Federal, mejor conocido como “El Búnker”, es una construcción subterránea de 10 mil 580 metros cuadrados que albergarían toda la base de datos de los sistemas nacionales y estatales para tener el control tecnológico de la inteligencia y el espionaje nacional, explicó Rodríguez Velázquez.
“El búnker” fue definido por la titular de Seguridad Pública como “la síntesis de los delirios de grandeza de Genaro García Luna y de Felipe Calderón Hinojosa”, pero también en uno de los proyectos más onerosos opacos y fallidos.
Las instalaciones se construyeron mediante el otorgamiento de contratos otorgados de manera directa y sin licitación a 29 empresas y tres universidades, dijo Rodríguez Velázquez.
Agregó que la mayor tajada de los contratos le correspondió a teléfonos de México con mil 252 millones de pesos, es decir el 37 por ciento del presupuesto.
La segunda empresa más beneficiada fue Tradeco Infraestructura, a la que se le pagaron 534 millones de pesos por la construcción del llamado edificio inteligente, mismo que quedó incompleto.
Tradeco también habría recibido 10 contratos para instalar la infraestructura informática para la operación de la Plataforma México, durante los años 2007 y diciembre de 2012, según el Libro Blanco elaborado por la propia Secretaría de Seguridad Pública.
Túnel que ni “El Chapo” tenía
Las instalaciones también incluyen un túnel de 400 metros que conectaba la oficina de García Luna con el edificio del Centro de Inteligencia, dijo Rodríguez Velázquez.
El túnel está climatizado e iluminado las 24 horas del día. Es un túnel que ni el “Chapo” Guzmán se atrevió a construir, dijo la titular de la Secretaría de Seguridad Pública del Gobierno Federal.
Sin embargo, seducido por los millonarios sobornos del cartel de Sinaloa y de otros grupos delictivos, García Luna jamás procuró que “El Búnker” cumpliera su propósito de combatir la delincuencia y en cambio se vivió el sexenio más sangriento.