
Esto es lo que considero fue más relevante para los mercados financieros en la semana. Espero que les gusta, les sirva y lo compartan. Recuerden que pueden escribirme sus dudas en cualquiera de mis redes sociales, me pueden encontrar como @luispatrimonial
Hoy me compré una paleta en la michoacana y me costó mucho trabajo creer que ya costaban $25 pesos, recuerdo como hace unos 20 años con $5 pesos me compraba una en la feria de Chicxulub, que lindas épocas aquellas y que fuerte ha sido la inflación alimentaria. Seguimos experimentando en el país niveles de inflación muy por encima de lo que habíamos tenido en las últimas dos décadas, de hecho, desde el año 2000 mil no vivíamos tasas de inflación tan fuertes como las que tenemos hoy en día (sin contar el año pasado). Lo anterior a pesar de que nuestra moneda ha tenido un comportamiento estelar y ha vivido una apreciación que pocos, sino es que nadie, vio venir. Sí, la inflación podría estar peor sino fuera por la fortaleza del peso pues recordemos que la mayoría de los bienes que consumimos en el país son traídos de otros países y se pagan con dólares, o sea que mientras más fuerte está el peso, menos nos cuesta comprar estos bienes y servicios.
La inflación no es cosa solo de México, no crean que estamos solos en este problema, de hecho, la semana pasada en España y Francia el último dato de inflación sorprendió con incrementos por encima de lo esperado, lo que ha provocado que la expectativa respecto a lo que hará el Banco Central Europeo es que continúen incrementando la tasa de referencia hasta llevarla a un 4% (que es mucho para lo que los europeos estaban acostumbrados, aunque para México no suene como tanto). Y como en Estados Unidos, se espera que las tasas se mantengan elevadas por un tiempo. Lo anterior llevó a que los bonos europeos cayeran (y su tasa de rendimiento subiera), la tasa de rendimiento del bono a 2 años en Alemania subió a su nivel más alto desde 2008.
Reapertura China: La economía del gigante asiático está rebotando ahora que quedaron atrás las medidas impuestas durante la pandemia. La industria manufacturera registró la semana pasada su mejora más significativa en los últimos 10 años. Tener a China otra vez produciendo podría ser un contra peso a la desaceleración que se ha visto en otras partes del mundo, o sea un salvavidas contra la recesión. Pero también pudiera hacer que la inflación sea más difícil de controlar.
Mercado laboral en Estados Unidos: El número de nuevas solicitudes de subsidio por desempleo cayó nuevamente y se ubicó en 190 mil, por debajo de los 195 mil que esperaba el mercado y de los 192 mil de la semana anterior. Otra muestra de fortaleza del mercado laboral que consolida la expectativa de que la Reserva Federal (también conocida como la FED, que es el Banco Central de los Estados Unidos, el equivalente a lo que para nosotros es El Banco de México) continuará con los incrementos de tasa. Más adelante en el mes se espera un aumento de 25 puntos base (1/4 de punto porcentual).
Tasas en Estados Unidos: Finalmente la tasa del bono a 10 años cerró por encima del 4% el jueves de la semana pasada y aunque ahora se encuentra ligeramente por debajo, sus niveles actuales no se veían desde noviembre de año pasado. Esto se da como consecuencia del ajuste que ha tenido el sentimiento de los inversionistas, que tras haber creído que la inflación ya era cosa de la historia y que la FED empezaría con los recortes de tasa a finales del 2023, ahora han tenido que echar reversa e ir haciéndose a la idea de que las tasas no bajarán en 2023 y que ahora el techo sería más elevado al previsto anteriormente.
Economía americana: A pesar de que la actividad económica del sector manufacturero en los Estados Unidos lleva ya 4 meses consecutivos de caídas (tras haber tenido 28 meses de crecimiento), esto no se ha traducido en menores precios, por lo que la batalla con la inflación continua para la FED, lo que significa mayores tasas, menor incentivo para invertir, mayor incentivo para ahorrar. Pero si el consumidor sigue resiliente (o sea, si aguanta vara) y las empresas no invierten, entonces la demanda (gente buscando comprar bienes o servicios) podría permanecer por encima de la oferta (bienes o servicios a la venta) y hacer que la inflación no ceda (o sea que sigan subiendo los precios a ritmos más elevados de lo deseado). Por lo anterior es que se dice que la FED tendrá que continuar su camino restrictivo hasta lograr que el nivel de desempleo incremente y esto a su vez se traduzca en una menor demanda que permita que los precios bajen de manera importante.
Resumen: En general la semana había sido mala con la inflación que no cede, la tasa del bono a 10 años regresando al 4% y comentarios de miembros de la FED en el campo de lo restrictivo. Sin embargo, el jueves y el viernes, el mercado se sacudió los nervios y cerró la semana en verde. La tónica sigue siendo la misma. Tener Bonos de corto plazo pinta como la apuesta más segura, así en lo que se aclara más el panorama, se saca provecho a los altos niveles de tasa actuales.
¿Por qué hablo tanto de lo que pasa en la economía en Estados Unidos? Porque al ser la más grande del mundo, y al ser nuestro socio comercial más importante, lo que pasa ahí influye fuertemente en lo que pasa en las economías de nuestro país y del resto del mundo y, por lo tanto, impacta en nuestros bolsillos.