
Un error reiterado que cada vez se agranda más consiste en decir que la Catedral de Mérida, construida de 1562 a 1598, es la más antigua de América, claro, con excepción de la de Santo Domingo, en la República Dominicana.
Cuesta trabajo pensar que nuestra modesta capitanía general tuviera el privilegio de contar con una catedral antes que otras ciudades de mayor peso político o económico (Cuzco, Lima, Quito, Cartagena de Indias, etc.) y que en tiempos de tanto fervor religioso no existiera hasta 1562 ninguna catedral en todo el continente, a excepción de la mencionada.
La catedral es la sede de un obispado o arzobispado y como la primera diócesis creada en tierra firme fue la de Panamá en 1513 y se fueron creando otras más a lo largo del siglo XVI, es de pensarse que tuvo que haber templos que cumplieran con la función de catedrales antes que en Yucatán, cuyo obispado se erigió en definitiva en 1561 (con antecedentes que se remontan a 1518, aun lejos de que la península fuera conquistada por los españoles).
En el caso de la Nueva España, el primer arzobispado fue el de la Ciudad de México y quedó a cargo de Fray Juan de Zumárraga en 1528. Conforme a datos de Silvio Zavala, la primera iglesia mayor que hubo en México se había construido de 1524 a 1532, fue elevada a catedral en 1534 y en su mayor parte se hallaba en el ángulo noroeste del atrio de la actual Catedral Metropolitana, frente al edificio del Monte de Piedad. Su orientación era de oriente a poniente y no de norte a sur como la actual.
Esa primera catedral funcionó a lo largo del siglo XVI y fue demolida en 1624, aunque quedan algunos vestigios de ella, además de una sencilla representación en el Mapa de Uppsala (1555). En concreto, esa catedral fue la primera que hubo en México, aunque fue sustituida por la existente cuyos primeros trabajos de construcción dieron inicio en 1573.
Situaciones parecidas encontramos en otras ciudades, como Tlaxcala, cuya diócesis fue erigida en 1528, aunque la sede pasó a Puebla en 1543. El Templo de Nuestra Señora de la Asunción, que es la actual Catedral de Tlaxcala, fue concluido en 1536.
Y para no poner más ejemplos está el caso de Guadalajara, cuya primera catedral se construyó en 1549 y años después, en 1568, se ordenó la construcción del edificio actual, concluido en 1618. Esa primera catedral de Guadalajara se ubicó donde está la Iglesia de Santa María de Gracia, frente al Teatro Degollado.
En Mérida el obispado se creó en 1561 y al año siguiente dio inicio la construcción de la catedral, en sustitución de un modesto templo, y se concluyó en 1598, en un tiempo bastante rápido para la tecnología de la época.
Por ello, en aras de la precisión, debe decirse que en el Continente Americano, en tierra firme, el edificio de la Catedral de Mérida es el más antiguo de los actualmente existentes que haya sido construido y concluido específicamente como catedral, pero ello no significa que sea la catedral más antigua de América, ya que existieron otras, aun cuando sus respectivos edificios hayan dejado de tener tal función o se hayan demolido.
Aparte de eso, varias catedrales tuvieron un inicio de construcción previo a la de Mérida, pero se concluyeron por completo después de ésta, algunas con un proceso muy largo como la de la capital mexicana, terminada hasta 1813.
Reiterando, debe decirse: la Catedral de Mérida, como edificio, es el primero que se concluyó como catedral de los actualmente existentes en América, con excepción de la correspondiente a la capital dominicana, pero de ninguna manera es la catedral más antigua del continente, ya que previamente existieron varias más, algunas incluso con una diferencia de varios decenios.